Cientos de colonos israelíes, apoyados por militares de este régimen, atacaron violentamente a fieles palestinos en la Mezquita Al-Aqsa, en la ciudad de Al-Quds.
Medios palestinos han informado este domingo de que la irrupción de los colonos israelíes, bajo fuertes medidas de seguridad, en Al-Aqsa, ha provocado enfrentamientos directos entre fieles musulmanes y militares israelíes.
En las imágenes difundidas en las redes sociales se aprecia cómo cientos de fuerzas especiales israelíes y un sinnúmero de agentes de los servicios de inteligencia atacan con brutalidad a los musulmanes presentes en la zona para abrirles paso a los colonos, a fin de que se internen y profanen la Explanada de las Mezquitas.
En este sentido, el Movimiento de la Yihad Islámica Palestina ha alertado de que el régimen de Tel Aviv pagará por sus medidas hostiles y las provocaciones israelíes contra la Mezquita Al-Aqsa.
A modo de respuesta a las violaciones y las medidas represivas de los efectivos israelíes, los fieles musulmanes lanzaron piedras, sillas y todo tipo de objetos contra la policía y los colonos para defender el tercer lugar sagrado del Islam. Israel pretende destruir la Mezquita Al-Aqsa para transformarla en un templo judío.
Las fuerzas israelíes, además de cercar la Mezquita Al-Aqsa y disparar balas de goma y lanzar gases lacrimógenos contra los manifestantes palestinos, han detenido a varios de ellos.
Los esfuerzos del régimen de Tel Aviv por destruir y judaizar la Explanada de las Mezquitas —que alberga la Mezquita Al-Aqsa y la Cúpula de la Roca—, a la que los israelíes llaman “Monte del Templo”, han desatado la ira de los musulmanes de todo el mundo.
Con apoyo de EE.UU., Israel multiplica sus provocaciones para intensificar la presión que ejerce sobre la población autóctona con diferentes medidas ilegales, como el desarrollo del denominado “acuerdo del siglo” y sus declaraciones sobre la posible anexión de más territorios ocupados.
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